miércoles, 25 de julio de 2007

No es lo mío

Si es que yo no estoy hecha para estas cosas... No se que ha podido más: la pereza, el coste, la pijería... Pero he dado por finalizada mi experiencia gimnástica. Lo sé, lo sé... He durado muy poco, pero es que no va conmigo lo de sudar. El entusiasmo del principio pronto pierde consistencia por la propuesta de otras actividades más apetecibles: mirar el techo fijamente, leer la biblia o el corán...

Quizás el día en que mi moreno, que tiene una voluntad que le lleva al gym todas las tardes, me lleve a mi de la mano y compartamos además de casa, máquinas y agujetas... Quizás ese día... Sólo quizás... vaya.

Si no tendré que esperar a que las vacas vuelen o las ranas tengan pelo.

Yo lo he intentado que conste.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

No me lo podía creer cuando he leído que has tirado la toalla. Después de escucharte un día tras otro toda la oferta maravillosa de actividades que ese "piriqui-gym" te ofrecía.
No desesperes, son cosas de la edad. Retomarás el tema cuando empieces a ver los "signos".
Tu cuerpo te habla aunque ahora no lo escuches.

Anónimo dijo...

Qué tranquilidad! Temía que fueras absorvida para siempre por el lado oscuro... Bienvenida!
Muac y remuac!!!