sábado, 4 de septiembre de 2010

A veces... sobran las palabras

Cuando no estás casada, pero como si lo estuvieras, es complicado presentar a:
¿tu pareja? Pueden pensar que eres lesbiana, encima llevando el pelo corto es poner muy fácil los tópicos más tontos.
¿novio? Cursi, de instituto o "tuto".
¿éste? Despectivo, igual después de esta presentación estás soltera.
¿el que vive conmigo? Confusión con un compañero de piso.
¿mi amor? Ñoño y raro.
¿el futuro padre de mis hijos? Y él sale corriendo.

Yo he optado por marinovio, un mix gracioso pero con el que mi chico no empieza a hiperventilar.
Otra cosa son los motes cairñosos, otro tema complicado. Yo, como he tenido parejas un poco... "escasas románticamente hablando", no he sido la costilla, ni la cari, ni la gordi, ni la churri, ni la faraona, de nadie (qué casi que mejor, la verdad).

Un caso extremo son mis padres que se llaman cuqui estén donde estén. ¿Qué mi madre está en el otro extremo de la planta de un centro comercial? Pues lo nombra sin verguenza para que mi padre atienda a su llamada. El problema: en alguna ocasión varios hombres han girado la cabeza.

Otro caso: como yo llamo aqui a mi marinovio, le nombro como mi moreno hubo quien pensó que era mulato o negro.

Ahora, mal que le pese, le llamo (estemos donde estemos) carichuchurri, que engloba lo más de lo más peor de todos los motes cariñosos que he conocido. Creo que no le sienta muy bien porque él siempre me responde al mote con chorlimonguer, lo cual me mosquea. Pero yo sigo erre que erre. Sobre todo si puedo gritarlo en medio de un centro comercial. Y que la gente se gire para mirarle a él y se rian. 

domingo, 25 de julio de 2010

Salir de noche

Anoche el moreno y yo salimos. Solos. A una salida completa: cine, cena y copa. Tras meses de o bien tener trabajos que hacer, o bien trabajar, o bien no tener dinero... ayer nos liamos la manta a la cabeza y sin motivo aparente, más allá del de salir por salir... salimos. Incluso de forma improvisada, podría decir, aunque muchos no me creerán.

Evidentemente la falta de costumbre tuvo sus consecuencias. Lo primero es que fuimos a ver una peli de dibujos para frikies (espero que nadie se sienta ofendido porque me considero parte del colectivo) en 3D y en versión original, para añadir más dificultad. El tema del 3D lo repetimos porque era imposible verla sin doblar sin esa condición, que me llevó a aguantar al moreno los quince minutos previos a la peli, limpiando frenéticamente sus gafas y recordándome que aquello era una mierda.

Una vez que empezó la peli, recordé porque a este tipo de peli (Toy Story 3, por cierto) suelo ir sola: al moreno no le gustan y hay que aguantar sus "no me gusta" cada cierto tiempo.

A la salida, sin embargo, comentó que "aunque lo del 3D es una puta mierda, la peli tiene sus puntos graciosos". Ay.

Fuimos a cenar a un japo. Hasta ahí todo fue normal. Al salir tuvimos la idea de "salir" aunque yo no entiendo muy bien lo de "salir" los dos solos.

La falta de costumbre nos llevó a aceptar la "supuesta" invitación de un RRPP (o señor que reparte flyers por la calle) para un lugar con mojitos. Yo es que oigo la palabra mojito y me nublo. Pues bien, nos metimos en un antro, nada glamouroso (suelo pensar que todos son fashion cuando es todo lo contrario), con música a toda leche y vacío. Me sentí mayor. Nos bebimos las dos copas por 11 euros y páfuera.

En el camino, aprendimos a esquivar a más RRPP y llegamos a otra zona mucho más glamourosa. Incluso me arriesgué a llevar al moreno al único local que yo conocía, donde efectivamente los mojitos están deliciosos y casualmente cuestan 5,50€. Cuánd aprenderemos a hacerme caso...

Lo bueno de no tener ya que ligar, ni de salir para ello, es que veo a mi moreno en su máximo apogeo nerd: me estuvo contando todos los fascinantes detalles del libro que se está leyendo sobre la vida de las hormigas. Es lo que tiene el amor, supongo. A mi tb me parecieron fascinantes.

Aunque prometimos que esto había que repetirlo más a menudo, repitiéndonos una y otra vez lo jóvenes que somos, y que gracias al cielo, no tenemos hijos... imagino que hasta dentro de unos  meses no repetiremos la hazaña de salir de noche.

viernes, 16 de julio de 2010

Verano

La última vez que escribí era primavera. Y ya es verano. Parece que ultimamente se me escapa el tiempo entre las manos. ¿Quién invento el cálculo del tiempo? Quiero saberlo porque me cae mal. No me gusta la fragmentación que hacemos de él y lo obsesionados que vivimos por tenerlo y no tenerlo. Hasta el perro vive obsesionados por los tiempos! En su caso vitales y básicos: me hago pis/quiero comer. Y por culpa del tiempo estamos los dos a las 7.30h en la calle dando vueltas como tontos.
Buf y no voy a entrar a hablar de Los Tiempos: tiempo de casarte, de tener hijos... Buf, últimamente son temas que me persiguen. Será por el tiempo. El otro día durante una comida, mi abuela comenzó a pedir bisnietos. Ante la cara de pánico de mi moreno, le dije que podía estar tranquilo, que hasta dentro de cinco años no me lo planteaba. Su respuesta histérica, con más cara de pánico aún fue: ¡NO ME PRESIONES, NO SE SI ESTOY PREPARADO! Ojiplática me quedé, si cinco años le parecen poco para prepararse. Luego lo pensé mejor y le dije que prefería adoptar, y que eso, conociendo los tiempos del proceso, le da como cinco años más para hacerse a la idea. Se quedó algo más tranquilo.
Asi que tengo diez años para seguir perdiendo, gastando, usando, olvidando, calculando, menospreciando, valorando y fragmentando mi tiempo. Ahí es ná.

jueves, 27 de mayo de 2010

Y el tiempo pasa...

... y ya es casi junio!!!!!! Madre mía, que abandonado tengo el diario! Con la cantidad de cosas que ha pasado! Intento resumir:

- Haciéndome la lista (y porque inicialmente parecía una idea divertida) propuse estudiar el programa Generación Ni Ni para el trabajo de una asignatura. La peor idea del mundo. ¡Qué estrés! Ocho niños encerrados en una casa sin nada que hacer durante trece programas que duran casi dos horas! (¿Por qué Fama no habrá empezado de nuevo? ¿POR QUÉ?)
- En una asignatura nos mandan como trabajo final hacer un blog. Y este no sirve. Mecachis!
- En el Taller de Cocina la gente repite!! Creo que la técnica de darles un vinito para acompañar los platos preparados ayuda a que salgan tan contentos... que quieren repetir!!!
- Cumplí un año más. Y me dolió. Por primera vez me vi mayor. Aggh.
- El perro ya casi no vomita (ejem: a finales de mes tenemos un bautizo y no tenemos dónde dejarle...).
- He descubierto que quiero hacer galletas, macarons y muffins todos los días del resto de mi vida. Con lo que me pregunto: ¿Y ahora qué estudio? ¿me convalidarán las horas de cafetería por asignaturas de libre elección como cocinera profesional?
- El moreno  y yo vamos juntos (y solos) a clases de inglés. Él va de pasota (porque sabe más) y yo de "mirá que atenta estoy!" (porque se menos).
- Vivo obsesionada con el taller y con el máster. Enganchada a las gominolas de Ooumowononn (o como narices se escriba). Cabe la posibilidad de ser adicta.
- Encontré a la ilustradora de todos los libros que algún día publicaré.
- He encontrado un grupo de gente genial que anda también loca por la gastronomía como yo! 
- Quizás en 20 días vuelva a ser persona (aunque no prometo nada).

... y el tiempo pasa... despacico... como decía Madonna.

sábado, 3 de abril de 2010

Y los días pasan

Se que en mi situación actual hablar de días de fiesta o de vacaciones resulta un poco absurdo pero voy a hacerlo. El mero hecho de no tener clase son vacaciones. Pero por lo demás... nada de nada. La única diferencia con el resto de semanas es que esta la sociedad en general, ya de por si lenta, va tan lenta que se para. Y eso se nota. Porque por fuerza te paras tú también. Y el tiempo de fiesta parece que cunde menos y la lista de cosas por hacer en vez de bajar, aumenta. Y las tareas se acumulan una tras otras, amontanadas como mi montaña de ropa para planchar. Reconozco que para ciertas cosas no me va la vida hacerlas y las voy posponiendo (como planchar aunque no tenga ya ropa lisa que ponerme). Y toda una semana se va en nada: ni un libro entero, dos trabajillos, una visita a Ikea y mucho "actualizar" la agenda. Quizás todo sea culpa de aquella hora que nos quitaron hace una semana... Quien la recuperara!

miércoles, 24 de marzo de 2010

Master del universo!

Últimamente mi vida parece una montaña rusa, unas veces arriba y otras abajo. Una semana, una nota mediocre porque el profesor... digamos que... mejor, no digamos nada. La semana siguiente, matrícula de honor en otra. Y así una no sabe si lo está haciendo bien, mal o los criterios de los profesores son raros. Y mientras, se acerca el fin de curso (dos meses no son ná) y cada vez el proyecto de tesis está más liado en mi cabeza. A pesar de que hablo con profesores, de que pido opiniones, no se si me lío más o menos. Y aunque el tema, inicialmente ya está elegido, tengo que tratar de descubrir un enfoque original para no repertirme como la cebolla. Y en algunas clases sigo teniendo la sensación de que no me entero de nada, de que lo mío es la frivolidad y lo banal y de que nunca podré utilizar frases incluyendo "per se". El taller de cocina está pero no está, y yo ya necesito que esté para poder centrarme en tareas concretas. Y en estos líos estoy, entretenida con mis cositas.

viernes, 19 de marzo de 2010