En Madrid, hoy el lunes se ha levantado vestido de viernes. Y la verdad es que ese traje le sienta de maravilla. Tiene un color diferente, más relajado, y su “rollito” es más amable. No me ha gritado al oído para que me levantara de la cama, ni me ha hecho sentir una desgraciada recordándome que todavía queda el martes, el miércoles, el jueves y el viernes. En mi extraña cabeza los días tienen colores y formas y los visualizo mentalmente así según tenga un evento especial (una reunión, un cumpleaños, un cine, una comida...) o sea un día ordinario sin nada especial en la agenda. En mi agenda, en mi almanaque y en mi calendario de pared (madre mía como tengo de controlado el tiempo) mañana día 15 tiene un globo dibujado. Hoy es un lunes-viernes de un color alegre, donde sólo voy a trabajar la mitad del día, por lo tanto es un medio día de trabajo y un medio día de ocio. Medio lunes, medio viernes. Toda una tarde de disfrute y sin el agobio de irse a la cama pronto porque... ¡mañana no hay que madrugar! Por supuesto, mañana es también un día raro. Es un martes-domingo. De esta forma esta semana extraña tiene dos viernes y dos domingos. Sin embargo, a mi las semanas que más me gustan son las que todos los días son sábado.
3 comentarios:
La mejor sin dudarlo. Justo anoche pusieron La reina de África, otra película maravillosa. Y lo de Spencer, vaya uno a saber, como se suele decir: el que esté libre de pecado que tire la primera piedra. Todos tenemos grietas e incluso socabones, puede que se le colara por uno de ellos sin darse cuenta y allí se quedó.
Los dias de colores son siempre bonitos, y el dia 15 para mi tambien tiene un color especial..... aunque este año tira al gris, pero ya cambiara.
besos
Jejeje. Los días vestidos es una gran ocurrencia. Seguramente al lunes le hebrá encantado vestirse de viernes.
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