martes, 20 de marzo de 2007

The love is dead

El otro día, una amiga me contó que por fin le había confesado a su hermano que le gustan las chicas. Sorprendentemente a esta declaración, él la respondió con un normal de lo más natural. Y es que analizándolo lo "anormal" empieza a ser que nos gusten y salgamos con hombres. Creo que tanto libro de historias de amor, tanta película de amor y agua fresca nos han atrofiado el sentido común. La cosa entre hombres y mujeres está (en mi opinión) cada vez más complicada. Los que no están traumatizados o enganchados en relaciones fallidas (aunque sean de hace diez años), tienen miedo al compromiso (¡desde la primera cita!), tienen manías muy muy raras (cortarse las uñas durante la cena) o no ven a la mujer de su vida (ni lo intentan al menos) ni teniéndola delante. Además está el hecho de que cada vez está más dificil encontrar hombres libres y felices (y ya si son guapos... ). Lo de los cursos ya lo tengo trillado. Vale que en el curso de patchwork no esperaba encontrarme a George Clooney haciendo una colcha pero vamos... No se, el panorama está cuanto menos "raro". Tanto meetic, match.com... pero ¿qué está pasando? Yo me veo incapaz de apuntarme. Aunque nunca digas "de este agua no beberé".... porque te ahogarás en ella al final. Estoy haciendo un estudio de "El amor": historia, historias, naturaleza, conceptos, filosofía, corrientes, formas... Cada vez estoy más convencida de que... EL AMOR HA MUERTO. Llamadme Rutzsche.

¿Qué ha sido de las citas? ¿Qué ha sido de ir al cine y darse mimitos en la oscuridad? ¿De dar paseos y hablar y hablar? ¿Por qué la famosa conversación de ¿qué somos? ¿hacía dónde vamos? se plantea antes incluso de conocerse? ¿Por qué hay gente empeñada en estar sola con lo chuli que es discutir y odiarse en compañía? Mira que... no me importa ir sola al cine, tomarme un café sola, visitar un museo sola, ir de compras sola, dormir sola pero... ¿no es mejor comentar la peli al salir del cine, conversar en un café, criticar los cuadros, aburrirse en Zara, notar los pies fríos bajo las sábanas...?

La resignación es que ya no espero flores, ni unos mariachis en mi puerta, ni siquiera una rodilla en el suelo y un anillo de diamantes... Un cine, una buena conversación, comprensión, felicidad, honestidad, respeto, buen culo... Bueno, en realidad, ahora que lo pienso, quizás estoy pidiendo demasiado ¿no?

6 comentarios:

Eolrin dijo...

Cada vez más divorcios, cada vez más separaciones, cada vez más niños que sufren por la incapacidad de que sus padres puedan ser adultos.

Mucho se pierde pero yo aún confio en las relaciones humanas, en la calidez de la charla aún siendo discrepante, en ese sorbito de vida cuando te cruzas con una mirada conocida.

Y conocer es compartir, y para compartir hay que arriesgarse. La cuestión es si estás decidida a arriesgar... yo la respuesta la tengo clara, me arriesgo a pesar del dolor que siempre puede llegar, porque prefiero arriesgar que arrepentirme algún día.

Zoe dijo...

No creo que haya muerto el amor, solo que los románticos no están de moda, y ya se sabe, hay que siempre ir con la corriente como borregos......

Rubia dijo...

Estoy de acuerdo contigo Eolrin. Yo también apuesto a pesar de poder perder porque creo que merece la pena arriesgarse que no quedarse esperando o no hacer nada. Pero la gente está atrofiada (algunos más que otros), cada vez más solitarios, más egoistas, más ermitaños. Una pena con la de gente maja que por ahí, la verdad.

Y sí, definitivamente los románticos estamos demodé absolutamente. Deberíamos hacer un club para conocernos los prorománticos porque hay tanto frívolo amoroso por la vida que da asco. ¡Yo paso de ser una oveja!

siemprepierdo dijo...

Que no que no, que no ha muerto, esta hay fuera esperando, lo que yo creo es que nos volvemos snob en el amor, selectivos, y a veces distantes, pero para no sufrir mas de lo necesario, aunque tambien es verdad, quien no se arriesga no recibe besos domingueros.

besos

Akiles dijo...

"Me entristece conocer a una persona que me gusta mucho y que piensa lo mismo que tú, porque no hay forma de hacerle cambiar de opinión" (eso has escrito). Supongo que yo no sea el más indicado para decirte que esa persona cambiará, pero si te sirve de consuelo, sé que algún día alguien me hará cambiar de opinión. Aunque mantenga mis principios y mi forma de ser, podré ya no tolerar sino caer en lo que la gente llama amor -racional, eso sí- pero amor.

Anónimo dijo...

El amor existe, unos lo esquivan, otros lo abrazan. Sólo hay que saber elegir. Saber cuando aguantar. Y saber si hay que rendirse.

Ivan Drago