Mi moreno y yo estamos enganchadísimos a la serie Héroes. Me diréis que voy con un poco de retraso puesto que ya terminó la temporada en la televisión, pero es que nosotros llevamos otro ritmo, preferiblemente sin anuncios. Además es una gozada tener en tu poder todos los capítulos juntos y hacer esfuerzos sobrehumanos para no caer en la tentación de verlos todos de seguidillo.
Lo dicho. ¿Por qué nos gustarán tanto los héroes? Esas personas que bajo apariencias corrientes y trajes baratos esconden un superpoder, atraen la atención de los humanos vulgares sin mayor poder que el de poner un lavadora, hacer la cena y seguir la conversación de tu pareja a la vez.
Si, si... muchos me dirán que “todos tenemos un poder en el interior” y chorradas varias pero yo me refiero a tener un SUPERPODER.
En ocasiones me confundo y creo que poseo el don de la invisibilidad, porque paso tan desapercibida para algunos que creo que realmente no me ven. Pero no es voluntario así que no cuenta.
Mi moreno dice que poseo el poder del calor porque irradio tanto que parezco una estufa, pero tampoco lo controlo, así que tampoco cuenta. De hecho, funciona mal mi termostato porque siempre tengo frío.
Las mujeres aunque en ocasiones parezcamos Superwoman, es un simple espejismo que se agota un día cuando ya no puedes con tu alma y te derrumbas en el sofá sin poder moverte o cuando pasas a convertirte en la Increíble Hulka porque alguien en el trabajo se ha colado en la máquina de café.
Mi héroe favorito siempre ha sido Spiderman (ese q no tiene cara de Tobey). Pero tampoco me gustaría tener un poder que conllevara tanta responsabilidad. Y las mallas no me sientan tan bien.
Si me dieran a elegir, tendría serias dificultades por decantarme por uno. Quizás el que me parece más útil sea el de controlar el tiempo (al fin podría dormir y parecer puntual a la vez!!!). Pero es cosa difícil lo de elegir, aunque la mayoría de Superhéroes no tiene opciones: les pica un insecto o les irradian mientras están en un solar de pruebas nucleares (¿quién no ha estado ahí alguna vez?).
Mientras espero a que un insecto me pique, un parásito extraterrestre me invada o unas ondas hercianas me afecten... Seguiré a lo mío, que no es poco.
Lo dicho. ¿Por qué nos gustarán tanto los héroes? Esas personas que bajo apariencias corrientes y trajes baratos esconden un superpoder, atraen la atención de los humanos vulgares sin mayor poder que el de poner un lavadora, hacer la cena y seguir la conversación de tu pareja a la vez.
Si, si... muchos me dirán que “todos tenemos un poder en el interior” y chorradas varias pero yo me refiero a tener un SUPERPODER.
En ocasiones me confundo y creo que poseo el don de la invisibilidad, porque paso tan desapercibida para algunos que creo que realmente no me ven. Pero no es voluntario así que no cuenta.
Mi moreno dice que poseo el poder del calor porque irradio tanto que parezco una estufa, pero tampoco lo controlo, así que tampoco cuenta. De hecho, funciona mal mi termostato porque siempre tengo frío.
Las mujeres aunque en ocasiones parezcamos Superwoman, es un simple espejismo que se agota un día cuando ya no puedes con tu alma y te derrumbas en el sofá sin poder moverte o cuando pasas a convertirte en la Increíble Hulka porque alguien en el trabajo se ha colado en la máquina de café.
Mi héroe favorito siempre ha sido Spiderman (ese q no tiene cara de Tobey). Pero tampoco me gustaría tener un poder que conllevara tanta responsabilidad. Y las mallas no me sientan tan bien.
Si me dieran a elegir, tendría serias dificultades por decantarme por uno. Quizás el que me parece más útil sea el de controlar el tiempo (al fin podría dormir y parecer puntual a la vez!!!). Pero es cosa difícil lo de elegir, aunque la mayoría de Superhéroes no tiene opciones: les pica un insecto o les irradian mientras están en un solar de pruebas nucleares (¿quién no ha estado ahí alguna vez?).
Mientras espero a que un insecto me pique, un parásito extraterrestre me invada o unas ondas hercianas me afecten... Seguiré a lo mío, que no es poco.